lunes, 30 de abril de 2012

DESOLACION ESTEPARIA

Libro abierto
en tumba cerrada
el alma grita
su consuelo
con gritos que nadie oye
sin símbolos
ni brujerías
sin señales ni adivinanzas
en esta desolación esteparia
los lobos salen de cacería
y cazan fantasmas

Gris es el día
negra la tumba
desdibujado el libro
en estas mañanas
se hace más inmensa
la montaña
la distancia
entre vos y yo incalculable
ya que con
el día gris
la tumba negra
el libro desdibujado
nadie oye el grito
al gritar el alma
cuyo consuelo
es una tumba abierta
un libro cerrado
con símbolos
y adivinanzas
en todas estas tardes
azul-hadas.

© Santiago Morinigo
© Santiago Morinigo

martes, 24 de abril de 2012

COSMOGONIA

Nadie
¿ O todos?
El cielo murmura
con voces de otros cielos
su escencia es una pluma blanca
que desciende
girando y girando
hacia la impoluta
entraña de una palma
en petición

El universo conspira
cuando la plegaria
emana del corazón
los vestidos no se desgarran
ni las almas se destrozan
es en esta piadosa encrucijada
donde los boletos
son de ida y de vuelta

La luz fluye por encima de uno
que uno mismo
se siente
todos
¿O nadie?.

viernes, 13 de abril de 2012

BESOS AUSENTES

Lentitud
ojos entrecerrados
acuarelas se ahogan
en un pecho acompasado
mirlos disfónicos
no conciguen su dádiva
el ser es un eco
mutilandose
con la sombra de su ser
en el verso faltan letras
y todo verbo es irregular
los cristales del cielo
se rompen en lo besos ausentes
son en estos segundos
de horas infinitas
donde la mente con manos de ebanista
modela con arcaica paciencia
la simertría perfecta
de la luz de tu imagen.

miércoles, 4 de abril de 2012

POEMA ENSANGRENTADO

Arteria
luz mutante
espejos rotos
ojos sin sol

La mano
la mano
acaricia el hielo

Vacío
lo inhóspito
tergiversación
de la palabra
lengua en nudos
músculo mohino:
                         Corazón

Poniente destruido
savia sedienta
esperanza
¿Esperanza?
Letras equívocas
significado incierto.
        
      Sed
Alma rústica
tanto desierto
tanta muerte
sin tregua
sombras róen
el espíritu
y aún
en el pecho
         una flor
una única flor
una única flor roja
una única flor roja sangra
una única flor roja sangra ausente de latidos.

LA LLAMA DE UNA SOMBRA

Levedad in extremum
insensación de lo vacuo
en esta oquedad rutinaria
llueve cielos amargos
en toda la extensión del alma
y en los ojos arde
la llama de una sombra

La sombra

Muchas son las cadenas
que se cortan
cuando los planetas
convergen sin que se alinien

Un  no se qué
necesario de transcitar
por senderos trashumantes
cosquilléa el espíritu

Y en otras circunstacias
en otra latitud existencial
nutriendose de algo celeste
estalla a la gloria
una risa

Tu risa.